No es tan famoso como la Biblia pero casi. Quien más quien menos, todos hemos oído hablar alguna vez del Kamasutra. Pero... ¿sabemos de verdad sobre qué trata este libro escrito por una especie de sabio hindú hace más de quince siglos?
Para muchos, el Kamasutra es solo un libro de posturas eróticas. Gracias a él podemos aprender un sinfín de posiciones para follar de pie, sentados, tumbados, con la mujer arriba, con el hombre mandando... En el Kamasutra se recoge también una de las prácticas sexuales más populares, el 69, ésa en la que los dos miembros de la pareja se dan placer oral mutuamente. Para no aburrirse en la cama e innovar cada día nada mejor, sin duda, que echar mano del Kamasutra para ir ensayando cada una de las 64 posturas eróticas recogidas en él.
Posturas para follar
Para el autor del Kamasutra, existen 8 posturas básicas para hacer el amor. ¿Cómo se llega, entonces, a esas 64 posturas que se recogen en este famoso manual sexual? Haciendo variaciones sobre las mismas. Cada variación de cada postura proporciona a hombre y mujer diferentes sensaciones. Practicarlas todas implica enriquecer la experiencia sensual y convertirse en mejor amante.
En el Kamasutra hay posturas eróticas recomendadas para todo tipo de penes y vaginas. Quien tenga la polla grande debe saber qué postura elegir para sacar las mejores sensaciones a cada polvo. Quien no la tenga tan grande, también. Y eso mismo sucede con las vaginas. Cada coño necesita un tipo determinado de polla para alcanzar la cópula perfecta. El autor del Kamasutra se encarga en su libro de aconsejar también al respecto realizando una tipología básica de tres tipos de penes y de tres tipos de vaginas.
Repasar las páginas de posturas eróticas del Kamasutra nos sirve para descubrir que prácticamente no hemos inventado nada respecto a la forma de follar. Desde que el mundo es mundo las personas buscamos experimentar con diversas formas de penetración, con distintas maneras de disfrutar del sexo. Por eso existen el misionero y la carretilla, las tijeras el cangrejo y el perrito, formas de copular que se han ido repitiendo a lo largo de los siglos.
Algunas de las posturas del Kamasutra son sencillas de realizar, otras parecen diseñadas en exclusiva para acróbatas y contorsionistas. Cada cual debe saber hasta dónde le alcanzan sus condiciones físicas. Si no estamos entrenados convenientemente en el gym, mejor no probar a hacer según qué. Follar es muy placentero, pero contracturarse las lumbares intentando copiar alguna de las posturas recogidas en este manual sexual hindú no resulta muy divertido.
Consejos eróticos del Kamasutra
Pero el Kamasutra es mucho más que un inventario de posturas eróticas. Si pensamos que este libro es solo un inventario de maneras de follar es porque durante mucho tiempo este libro estuvo prohibido en Occidente. Cuando se publicó, allá por finales de los 60 del siglo pasado, se publicaron solo las páginas del libro dedicadas a recomendar esas 64 posturas eróticas de las que hablábamos. Por ese motivo mucha gente piensa en el Kamasutra como en un manual de posturas eróticas y no como en un manual de seducción o un libro de autoayuda, que es lo que realmente es. De hecho, las posturas eróticas recogidas por el autor del Kamasutra ni siquiera están dibujadas en la versión original del libro. Están solo explicadas. Es decir: el autor se limita a dar las indicaciones necesarias para realizarlas. Es en las diferentes versiones del Kamasutra que se han ido editando con los años donde las posturas han ido apareciendo "ilustradas", a veces con dibujos, a veces con fotografías.
En el Kamasutra original encontramos consejos para elegir una esposa, indicaciones para saber cómo seducir a una mujer, recomendaciones para ser una buena esposa, lecciones sobre cómo ser infiel sin levantar sospechas en la pareja, etc. El Kamasutra vendría a ser, así, una especie de manual de seducción y de libro de autoayuda.
Sin duda, todos esos consejos y todas las recomendaciones recogidas en el Kamasutra son fruto de un tiempo histórico determinado y están escritas para ser aplicadas en ese tiempo. Llevar algunos de los consejos del Kamasutra a la práctica nos conduciría en la actualidad a la prisión. Por ejemplo: el autor del Kamasutra recomienda intoxicar a la chica para, bajo sus efectos, poder "disfrutrar" de ella. Esta práctica recomendada por Vatsaiana (pues así se llama el autor del Kamasutra) tiene un nombre en la actualidad y ese nombre es violación, algo que, aparte de inmoral y sucio, está penado legalmente. Así, si cae un Kamasutra en tus manos y lees ese pasaje en el que se recomienda drogar a la pareja para abusar de ella, olvídate de poner en práctica esa recomendación.
Olvídate también de seguir al pie de la letra los consejos sobre cómo adquirir mayor potencia sexual. En tiempos de Viagra, ¿quién va a probar mejunjes o pócimas elaboradas con insectos? Si dudas de la potencia de tus erecciones, busca consejo médico o utiliza algunos de los juguetes eróticos que puedes encontrar en los sexshops. Un anillo para el pene puede bastar para solucionar problemas puntuales sin necesidad de ingerir alguna de las pócimas recomendadas por el autor del Kamasutra. Aunque estamos tranquilos al respecto: seguro que cuando leas cómo deben prepararse esas pócimas y qué ingredientes deben utilizarse pierdes todo interés en ellas.
Actualidad del Kamasutra
Y es que al leer el Kamasutra hay que saber seleccionar lo que nos sirve de él hoy en día y lo que no. Nos sirve, por ejemplo, el contemplar el sexo como una actividad placentera por sí misma y no como una actividad reproductora. Según la visión del Kamasutra, se folla para gozar, no para tener hijos. En ese sentido, el Kamasutra es un libro muy moderno. Hay que pensar que, en los años en que fue escrito, aquí en Occidente se tenía del placer sexual una visión pecaminosa. Follar por placer era pecado. El placer, de hecho, parecía ser pecado. Para el autor del Kamasutra, el sexo solo era pecaminoso si se practicaba de manera frívola. Es decir: si se follaba mal. Por eso él recopiló consejos para determinar qué era y qué no era "follar bien".
Y para follar bien, según el autor del Kamasutra, había que prestar especial atención a los preliminares eróticos. Esta manera de concebir el acto sexual es también muy "moderna". Cualquier manual de sexualidad actual recalca hoy la importancia de la caricia, el beso, el lamido, el mordisco cariñoso, el sexo oral como preparación para el coito, etc. Esto, que puede parecer muy actual, ya estaba recogido como vemos en un libro, el Kamasutra, que concebía el sexo no tanto como un acto puntual sino como una forma de vida y un modo de entenderla.
Y como es evidente, con las escorts anunciadas en ciudades como Barcelona, Madrid, Valencia, Mallorca, Girona ... puedes poner en práctica todas las posturas del Kamasutra que quieres, las prostitutas son expertas en artes amatorias y conocen a la perfección todas las posturas más excitantes para practicar sexo.
