Posturas eróticas para penes pequeños

Sábado, 18 de Julio de 2020

Hay muchos hombres acomplejados por el tamaño de su pene. Ya sabemos que se ha convertido en un mantra eso de decir que el tamaño no importa y que lo importante es saber usar el instrumento con el que la naturaleza nos haya dotado, pero quien tiene un pene que no destaca precisamente por su tamaño no acaba de creerse del todo eso de que el tamaño no importa. Para empezar, para estos hombres el tamaño sí importa. Y mucho. Y eso, a la hora de disfrutar del sexo, puede resultar una gran carga psicológica.

Pues bien: a los hombres de pene pequeño hay que decirles que pueden explotar al máximo las cualidades de su pene, aunque éste sea pequeño, si escogen adecuadamente la postura con la que van a follar. Hay posturas para follar si se tiene el pene pequeño que garantizan una penetración más profunda y placentera para la mujer. En los casos en los que el hombre no tiene una polla para lucir en películas porno lo importante es buscar una postura que, al ser ejecutada, garantice que la punta de esa polla incida durante la penetración sobre la zona del interior de la vagina que se conoce como punto G. Además si acude a una de nuestras escorts anunciadas en Barcelona o Madrid pueden ir con total tranquilidad, estas chicas de compañía son grandes expertas del sexo y saben como aprovechar una polla pequeña para el disfrute de los dos amantes.

Entre las posturas eróticas para penes pequeños podemos distinguir las siguientes:

El perrito acomodado

El sexo a cuatro patas tiene algo de animal, de instito puro liberado y puesto en acción. Cuando follamos a cuatro patas parecemos perritos (de ahí su nombre) que se han encontrado por la calle. De entre las modalidades del sexo a cuatro patas hay una que garantiza que un pene pequeño estimule directamente el punto G. Para ejecutarla, la mujer debe realizar una pequeña variación sobre la postura clásica. Dicha variación consiste en dejar caer el pecho, levantar el culo y mover un poco las rodillas hacia atrás. Colocada así, el hombre podrá agarrarse con fuerza a sus caderas para penetrarla con más decisión y empuje.

Combinar esta postura erótica para pene pequeño con la estimulación del clítoris, bien sea con el dedo, bien con un juguete erótico, puede ser una buena manera de proporcionar a la mujer un orgasmo de esos que no se olvidan en mucho tiempo.

Postura del perrito

El puente levadizo

Para ejecutar esta postura sexual para pene pequeño, la mujer debe tumbarse boca arriba, debe levantar las piernas y debe apoyarlas sobre los hombros del hombre mientras éste la penetra. Al colocarse así, la mujer está completamente ofrecida a su macho, con su vagina bien expuesta, y él la puede penetrar con mayor profundidad.

Para intensificar las sensaciones proporcionadas por esta postura basta con hacer uso de una almohada. Colocando dicha almohada bajo la pelvis, el hombre podrá realizar una penetración más profunda y podrá dar mucho placer a la mujer sin necesidad de tener una polla de 20 cm.

Postura sexual puente levadizo

El compás

Esta postura para penes pequeños es una variación de la anterior. También aquí la mujer está de espaldas, pero en esta ocasión sube solo una de sus piernas. Es esa pierna la que coloca sobre el hombro del hombre, que se la sujeta mientras la penetra. Mientras se la folla adoptando esta postura, el hombre puede, con su mano libre, acariciar su cuerpo, sobar sus tetas, masajear su clítoris...

Aunque el hombre tenga el pene pequeño, la mujer puede gozar de lo lindo con esta postura. Lo único que se le exige es que tenga un poco de flexibilidad para aguantar durante un rato en esa posición. El resto del "trabajo" dependerá del hombre.

En caso de que la chica se cansara de estar en esta postura, podría cambiar de pierna. A veces se experimentan diferentes sensaciones si es una u otra la pierna levantada.

El trono saltarín

En las tres posturas anteriores es el hombre quien tiene el control de la situación. En ésta que te recomendamos ahora, será la mujer quien lleve las riendas. Para ejecutar esta postura sexual para pollas pequeñas el hombre deberá sentar sentado. Podrá hacerlo en una silla, en un sofá o en el filo de la cama. Colocado así, la mujer se sentará encima de él y dándole la espalda.

Una vez se haya producido la penetración, la mujer decidirá el ritmo y los movimientos para subir y bajar sobre el eje del pene de su pareja. Mientras ella hace esto, el hombre tiene las manos libres para poder acariciar el cuerpo de la mujer. Sobarle bien sobadas las tetas mientras ella cabalga sobre él se una excelente y muy placentera manera de follar.

La cucharilla

De entre las posturas eróticas para rabos pequeños, ésta está especialmente indicada para aquellas parejas en las que existe una notable diferencia de altura entre los dos miembros de la pareja. Para llevarla a la práctica la chica debe acostarse de lado. El chico, entonces, debe estar colocado detras de ella, adaptándose a la forma del cuerpo de ella para poder introducir todo el pene en el cuerpo de su pareja. Esta postura permite al chico, desde atrás, el estimular los pechos de la chica o su clítoris. También puede, desde ahí, morder la oreja de la chica o susurrarle marranadas al oído, que es algo que siempre funciona muy bien para subir la temperatura de un polvo. Si el ritmo de penetración es lento, el placer es mayor.

La cucharilla

El Tsunami

Esta postura erótica, la última que vamos a recomendar para penes pequeños, no es fácil de realizar. Requiere de cierto entreno. Para hacerla, la mujer se debe colocar en el borde la cama y boca abajo. Colocada así, ella debe dejar caer su tronco hacia el suelo. El hombre entonces, colocado detrás, colocará sus piernas entre las de ella y la penetrará. Una almohada puesta en el suelo para apoyar en ella la cabeza o la cara ayudará a realizar esta medio acrobática postura erótica. También ayudará a ejecutarla el que ella apoye las manos en el suelo. Para gozar con esta postura para falos pequeños es mejor buscar una cama no demasiado altas. Lo importante es que la cabeza y los brazos de ella puedan tocar y apoyarse en el suelo.

A gozar por detrás

Una de las grandes ventajas de tener un pene pequeño es que la mujer pondrá menos pegas a la hora de valorar la posibilidad de disfrutar del sexo anal. Una polla pequeña asusta menos, cuando tiene que entrar por la retaguardia, que uno de esos pollones tan lustrosos que parecen que vayan a arrasar con todo. Cualquier postura para sexo anal es buena para gozar de un griego cuando se tiene el pene pequeño. Eso sí: por pequeña que sea la polla no hay que olvidar el uso del lubricante. Y es que el ano no es una vagina. No tiene la misma capacidad para dilatarse y hay que ayudarle a ello.

Sexo anal