Desde que el mundo es mundo ha existido la prostitución. Y también desde que el mundo es mundo se la intentado prohibir, regular, castigar, etc. En la actualidad son diversas las corrientes de opinión existentes sobre cómo actuar frente a ella. En la Unión Europea es donde mejor se ejemplifica dichas diferencias de opinión. Países como Francia, por ejemplo, optan por penalizarla. En Alemania, por el contrario, se ha elegido el camino de la regulación. Pero... ¿y al otro lado del Atlántico? ¿Qué postura normativa se ha tomado respecto a este tema? ¿Cuál es la legislación sobre prostitución en Estados Unidos? En este artículo vamos a hablar de ello.
Para hablar de las leyes sobre prostitución en los Estados Unidos hay que detenerse previamente a mirar qué tipo de régimen es el que impera en los USA. Los EE.UU. se articulan como una república federal formada por una cincuentena de estados federales. Todos los estados de la Unión tienen amplias competencias legislativas en muchos asuntos. ¿Las tienen también en lo que hace referencia a esta práctica y su ejercicio?
Lo primero que hay que resaltar al hablar de las normas sobre esta actividad en los Estados Unidos es que ésta es considerada ilegal en todos los estados. Solo en ocho condados del estado de Nevada no es ilegal y pueden existir burdeles. Eso sí: está estrictamente regulada. En el resto de estados, o bien se castigan los actos de prostituirse o bien se castiga la organización que la facilita y el funcionamiento de los burdeles, puticlubs o comúnmente llamadas casas de putas.
Así, en algunos estados USA, y dependiendo de la ley estatal sobre prostitución, se castiga a la profesional del placer y proveedora de servicios, al cliente de paga por dichos servicios o a quien ejerza cualquier tipo de intermediación. Los proxenetas quedarían englobados en este último grupo.
La ley sobre prostitución en Nevada
Como hemos indicado anteriormente, algunas zonas de Nevada son algo así como una isla extraña dentro del océano de la normativa sobre esta práctica en Estados Unidos.
¿Quiere eso decir que puede ejercerse con completa libertad dentro de esos condados? No. Como también hemos indicado, las reglas al respecto son muy estrictas.
Por ejemplo: no se puede ejercer en la calle. Solo en los prostíbulos que cuenten con licencia pueden solicitarse y ofrecerse servicios sexuales de pago. Los puticlubs, a su vez, están prohibidos en condados que tengan poblaciones de 700.000 habitantes o más.
Para obtener una licencia para abrir un prostíbulo en Nevada hay que pagar una licencia comercial. No existe, sin embargo, un impuesto que grave el consumo.
Los burdeles de Nevada solo pueden anunciarse en los condados en los que ejercer está permitida y los clubs de alterne. Eso sí: no pueden anunciarse ni en teatros públicos, ni en las calles de cualquier ciudad ni en cualquier vía pública.
En el Estado de Nevada establecen que cada condado fije la edad mínima a la que puede ejercerse. Hay condados en las que las prostitutas deben tener un mínimo de 21 años y condados en las que les basta con 18 para poder ejercer su oficio.
En los últimos años han surgido algunos movimientos que intentan prohibirla en los condados de Nevada en los que está permitida. Dichos movimientos no han tenido demasiado éxito.
Ley Federal sobre prostitución en los USA
La legislación estadounidense determina que sean los estados federados quienes se encarguen de la tarea punitiva sobre el acto de la prostitución y sobre quienes participan en él.
La penalización del tráfico de personas destinadas al ejercicio de los servicios sexuales, sin embargo, es una competencia federal. Es el gobierno central de la nación el encargado de castigar dicho delito tanto si se produce a nivel interestatal como si se produce a nivel de extranjería. Así lo determina la Ley Mann, promulgada en 1910 y enmendada recientemente.
El gobierno federal prohíbe también el ejercicio de la prostitución cerca de establecimientos militares.
Cierres de webs como Backpage.com
Unas de las más recientes iniciativas legislativas en lo que hace referencia a la normativa sobre prostitución en los EE.UU. son las llamadas leyes SESTA y FOSTA.
Los nombres de estas leyes corresponden a las siglas de las expresiones "Detengamos a los Traficantes" y “Permitamos a los Estados y Víctimas Luchar contra el Tráfico Sexual en Línea”.
Aprobadas por la administración Trump en abril de 2018, estas leyes prohiben el uso de plataformas digitales y páginas webs para anunciar servicios de contactos. A las prostitutas que ejercen su profesión en los USA se les prohíbe, pues, promover sus servicios por internet. Dicho de otro modo: se les prohíben poner anuncios en la web.
De entre todas las leyes sobre este tema en EE.UU., la que prohíbe los anuncios de contactos en internet es, sin duda, una de las que más afectan al día a día a las prostitutas estaodunidenses.
Plataformas digitales tan importantes como Craigslist se vio obligada a cerrar su sección de citas. El FBI, por su parte, cerró e incautó la web Backpage.com, una de las plataformas de anuncios de servicios sexuales más populares.
Las prostitutas que publicaban sus anuncios en estas webs han criticado la legislación y, sobre todo, estas dos leyes. Según argumentan, el hecho de no poder publicitarse on line las obliga a ejercer su oficio en la calle, lo que implica una importante disminución de su seguridad.
Campaña para despenalizar la prostitución en Estados Unidos
Esta postura ha sido también defendida por algunas legisladoras que están intentando cambiar el signo de las leyes en los EE.UU. Una de ellas es Selene Colburn, legisladora del estado de Vermont. Según Colburn, despenalizarla serviría para desestigmatizar el oficio y para conseguir que la prostitutas buscasen una adecuada atención médica y, en caso de padecer problemas que afectasen a su seguridad, acudieran con toda tranquilidad a la policía para, así, encontrar en el cuerpo policial la protección necesaria.
Esta iniciativa debe ser englobada en lo que se considera un incipinete movimiento pro-despenalización de la prostitución en los Estados Unidos. Despenalizándola, sostienen los activistas de dicho movimiento, se conseguiría reducir el número de agresiones a prostitutas, así como el tráfico y explotación de las mismas.
Iniciativas de este tipo no han prosperado demasiado hasta el momento. De hecho, han fracasado en lugares como Maine, Massachusetts y, más recientemente, Washington.
